Por Beatriz de Bonaval
Más de un año de la llegada
de la ¨nueva política¨ y las ciudades gallegas gobernadas por los Dalton
gallegos van a peor a un ritmo tan rápido que es difícil cuantificarlo.
Foto: El Correo Gallego |
Xulio Ferreiro vive en su
mundo irreal saltándose los reglamentos de los plenos en una fiebre democrática
rara, sin gestión y paralizando no sólo la inversión propia sino la ajena
también. De hecho, por ejemplo, la Tall Ship no contará con el espacio de ocio
previsto por culpa de la pasividad y el pasotismo del equipo coruñés de
gobierno. Y suma y sigue. Mucho dinero y
puestos de trabajo al garete porque a estos les gustan más las romerías que el
trabajo..y así les va. Pero imaginen cómo debe ser el desaguisado de Santiago
para que Ferreiro reniegue de Martiño en foros privados y se permita dar
lecciones de gestión. En Santiago ya no sólo hay fochancas en las calles donde
multitud de vehículos están sufriendo desperfectos para la alegría de los
talleres y vendedores de neumáticos. Ahora también hay fochancas en las aceras
donde se caen cada día muchos ciudadanos y visitantes. Las excusas de lo más
variopintas : ¨se acabó la partida de rebacheo, se cae gente mayor, estamos
trabajando para arreglarlas….¨ Todo mentira. El dinero y el tiempo lo gastan en nuevos panfletos de
autobombo; pocas cosas le gustan más a un mareante/podemita que un panfleto
donde contar sus mentiras. También gastan en contratos con amiguetes culturetas
y en asesores externos de esos que sobraban con el PP pero que vuelven a crear
plaza para ellos. Porque se les llenó la boca diciendo lo que cobraban los
directores de área del gobierno anterior …y han tardado bien poco en
necesitarlos y pagarles lo mismo. La diferencia es que ni aún así se mueve un
papel en urbanismo y en contratación van de mal en peor…igual el perfil no era
el adecuado y ahí sí se está tirando el dinero, amén de cabrear mucho a los
funcionarios.
Hace unos días un vecino
pintaba las losas sueltas de una céntrica calle para que la gente no se cayese
y al gobierno de Martiño en lugar de caerle la cara de vergüenza por no saber
dar las necesidades mínimas a sus vecinos y gestionar para solucionarlo, juega
a pasar la pelota de la gestión a los vecinos porque así ya si no tiene
presupuestos a tiempo, no será culpa suya. ¨Presupuestos participativos¨? Lo que tiene que hacer un alcalde y su equipo
es patear las calles (con cuidado de no caerse en las fochancas), hablar con
los vecinos, ver las necesidades y priorizar en los presupuestos. Y sobre todo trabajar y decidir. Va en el
cargo. Y no pasar la pelota al ciudadano que no mirará por el interés general
sino por el propio. A ver si esto es lo que querían….
Así que, así llevamos un año
de desidia y pasotismo y por si no se enteraron, estamos en fiestas …Sí las
internacionales (¿) del Apóstol. Lo entiendo, no lo parece. Es que se gastaron
casi todo en el panfleto y en pagar a medios …amigos, claro. Y como no son de
su rollo irmandiño progre, pues no molan.
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