Unas gotas de chavismo en Raxoi

Por Ana Ulla

Una vez más nuestro Amado Líder, Noriega, ha tenido la oportunidad de no hacer las cosas mal y la Knopfler, no por devolverlas que allá él, sino por su patológico afán de ser aplaudido, ahora le toca el turno a sus rencillas personales con el periódico que se regala con El Mundo, que viene siendo El Correo Gallego. Dolido, muy dolido está el histrión y aprovecha para cargar en su página particular con información interna del Concello sobre el reparto que del dinero destinado a medios dejó liquidado el anterior gobierno y cómo casi la mitad de ese dinero fue a parar al El Correo.

ha desaprovechado. Cuando aún colea el quedar como un cateto con las entradas de

Con maneras de matón denuncia que ese periódico la ha emprendido contra él en temas personales molestando a su entorno más cercano, haciendo de la descalificación, dice, un fin en sí misma más allá de la lógica crítica o línea editorial.  Lo cual pone en relación lógica con el dinero que recibió de la anterior corporación.

Las dudas saltan enseguida: ¿actuaría de este modo si, a pesar de ese dinero, no se le hubiera criticado como dice amargamente? Lo tiene muy fácil, utilizando sus palabras, ‘el juego democrático es para todos, o no es’. Pues bien, si lo que dicen de él es falso, ya sabe dónde tiene que ir, y si el dinero que se le da a El Correo es injustificado o incluso prevaricante, ya sabe cómo tiene que actuar. Pero utilizar información institucional para cargar contra una empresa privada, aleccionando a sus seguidores sobre la maldad de esa empresa y, pues no otra cosa puede desprenderse de la lectura de su alegato, hacer un llamamiento a cierto tipo de boicot es cosa propia de una república bananera. Sin olvidar el desagradable gesto de aprovecharse de la delicadísima situación económica de los trabajadores de El Correo para lanzar un último torpedo a la línea de flotación para que no quede duda que esa empresa es el mismísimo demonio.

Señalar con el dedo del poder a la víctima aprovechándose del cargo no es encajar con elegancia las críticas, es ser un matón.  Aquí nunca hemos defendido a El Correo y siempre que hemos tenido oportunidad hemos cargado contra las políticas municipales y autonómicas de subvenciones y asimilados de todos y cada uno de los medios, que no es solo El Correo. Pero de ahí a tratar de intimidar a un periódico, por malo y servil que sea, hay un abismo al que nuestro Amado Líder se está asomando peligrosamente. Ya está bien de buscar el aplauso fácil, si tiene que hacer algo que aplique la ley, no una red social donde ofrecer carnaza.

Ana Ulla: lampreasyboquerones@gmail.com