Publicado en SANTIAGOSIETE el 24 de Octubre de 2008
En tiempos de crisis ocurre que, si no quieres caldo, toma tres tasas, aunque sean de esas que van a subirnos para el próximo año en Santiago. Sí, esa ciudad donde sus responsables políticos acordaron congelarse el sueldo, una eurohibernación que a los demás nos deja fríos de calientes como estamos cada vez que llegan las declaraciones trimestrales y no precisamente las de amor.
Es graciosa esa facultad de poder congelarse o no la nómina por quedar bien, y ojalá pudiéramos hacerlo también los demás en lugar de aprender a apretarnos el cinturón, al menos quienes aún no hayan tenido que empeñarlo. Desde luego que esperamos el Año Xacobeo, aunque sea el laico que como apóstol de los sin-Apóstol predica la simpar doña Ánxela, porque no nos hará falta una inyección sino una auténtica transfusión económica para poder aguantar el tipo. El de interés.
Tan pesados nos pusimos que hasta Zapatero decidió tomar medidas, no porque haya crisis, que nunca la hubo, sino para que nos callásemos. Ahora entendemos qué querían decirnos con que la economía gallega va sobre ruedas, se referían al nuevo vehículo oficial de don Emilio. Pero no nos importa, siempre nos quedará el carril - bici.
Es graciosa esa facultad de poder congelarse o no la nómina por quedar bien, y ojalá pudiéramos hacerlo también los demás en lugar de aprender a apretarnos el cinturón, al menos quienes aún no hayan tenido que empeñarlo. Desde luego que esperamos el Año Xacobeo, aunque sea el laico que como apóstol de los sin-Apóstol predica la simpar doña Ánxela, porque no nos hará falta una inyección sino una auténtica transfusión económica para poder aguantar el tipo. El de interés.
Tan pesados nos pusimos que hasta Zapatero decidió tomar medidas, no porque haya crisis, que nunca la hubo, sino para que nos callásemos. Ahora entendemos qué querían decirnos con que la economía gallega va sobre ruedas, se referían al nuevo vehículo oficial de don Emilio. Pero no nos importa, siempre nos quedará el carril - bici.
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