Luna Llena de Oficios y algo de Primavera

Es la Luna Llena faro entre farallones de noche agitada de olas negras, Luna que se remanga las sayas para apacentar las estrellas con los zapatos en una mano y el libro de los conjuros en la otra, tan Llena que caben en ella recostados todos los oficios de la mujer, que son todos ellos, Luna que si se la agita se pueden oir las risas de los niños y de los enamorados, Luna con tocado que aún cuenta con los dedos las lágrimas de hoy que mañana con su soplo serán diamantes, Luna que es un cielo con monóculo, Luna recién ordeñada que sabe cada vez que se prueba a esa primera mirada que será para siempre,  Luna que se acuesta con embozo y de Llena al estirarse se le asoman por las sábanas negras del cielo sus pies de platino, Luna que luce como sello de lacre y nieve de los días por llegar que aguardan serenos buscando su sombra, Luna, en fin, que es para tantos fruta prohibida que alcanzar con el brazo infinito de los deseos que todo lo pueden para morderla en los paraísos de detrás de las almohadas donde viven todos los que alguna vez creyeron creer que creyeron que con un poco de tinta, un algo de papel y un espejo se puede escribir lo que escribes.