Finalmente llegó, sí, llegó a Santiago el cortamente anunciado azote de maleantes, la fusta de malhechores, la pesadilla del hampa, la “Superagente” que se nos prometió y que, qué le vamos a hacer, vistas sus funciones pareciera haberse quedado en poco más que una institutriz con la mili hecha, una especie de sereno con licencia para chivarse, una Lara Croft con rulos y guatiné. Pero algo es algo, ¿o no? Se encargará, cuentan, de coordinar a bomberos con protección civil, a esta con la policía local y a esta con los bomberos, y a todos ellos entre sí, un alarde de coordinación que los siglos en su asombro no alcanzarán a explicar cómo Santiago, y con ella la Humanidad, ha podido sobrevivir hasta ahora. Coordinados se vive mejor, una ciudad coordinada es más ciudad, la coordinación llevada a su culmen, el paroxismo de la coordinación. Siempre recordaremos ese antes con su después en que traspasamos el umbral de una nueva dimensión para adentrarnos en el universo, siempre tan cósmico, de la coordinación. Y es que los delitos en una ciudad coordinada se viven de otra manera, los desmanes tienen otro sabor con la coordinación, el vandalismo, si hay coordinación, posee otro color y, en fin, cuando lo prometido es deuda no queda otra que felicitarse por el cumplimiento del Concello, prometió una Superagente para hacer de la ciudad un lugar más tranquilo que el país de Pim y Pom, y aquí la tenemos…aunque…no estamos muy seguros, pero hay quien recuerda que no era esto lo que se dijo, ni el quién ni el para qué, pero quién está ahora para hacer memoria…!
Además, conviene no olvidarlo, nuestra Superagente también proviene de esa cantera de gigantes compostelanos en que se ha convertido Lavacolla en pocas semanas. Primero el pregonero, ahora la Superagente, lo próximo… ¿un hombre – orquesta? ¿un domador de pulgas? Al tiempo…lo importante es que la teníamos ahí al lado y posiblemente la suerte (o que echó su CV para el cargo en día propicio) la han colocado al frente del asunto. Apostemos a que el Concello haya acertado en el nombramiento porque no hay nada como ser amigo para poder elegir al candidato. Ser amigos de buscar soluciones a los problemas, se entiende…
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